El plátano

Nadie puede cuestionar que el plátano es una de las frutas favoritas de niños y adultos. Su sabor, su textura y el fácil pelado que además te permite un rápido acceso a su parte comestible, son algunos de los motivos por los cuales no falta en los fruteros de muchos hogares.

Empecemos con una curiosidad

La mayoría de los consumidores piensan que este proviene de un árbol, “el platanero”, pero no es así para sorpresa de muchos, ya que proviene de una planta herbácea (un arbusto por así decirlo) del genero musa.

Rompiendo mitos

Como todo gran alimento, este no está exento de mitos, el principal… “el plátano engorda”.

Hoy vamos a desmitificar esa afirmación que algún familiar, amigo ó compañero de trabajo nos ha dicho alguna vez.

Bien es verdad que el plátano no es la fruta más ligera que existe, pero no es tan calórica como se piensa y además tiene menos azúcar que muchas otras. No suele aparecer el plátano en muchas dietas hipocalóricas en gran parte debido a esta creencia, pero os adelantamos que el plátano no solo no engorda sino que puede servirnos de ayuda para controlar el peso.

Puede ayudar a regular el peso

El plátano contiene en su composición fibra dietética en forma de pectina y almidón resistente (parte del almidón no digerible completamente).

Como fibras que son, nos ayudan a controlar el apetito, puesto que nos confieren sensación de llenado y nos sacia, ayudando a personas que estén siguiendo una dieta restrictiva en calorías a no salirse de su pauta.

Además, recordar que la fibra dietética está asociada a una menor incidencia de obesidad, enfermedad cardiovacular, problemas intestinales y cáncer.

Punto óptimo de maduración

Si el plátano no está lo suficientemente maduro, esta verde, su consumo puede generar dispepsia. Si lo hacemos de manera habitual puede aparecer el estreñimiento.

El mejor plátano es aquel que tiene el tono amarillo de textura firme (con motitas negras o sin ellas) y su estructura es resistente a la deformación cuando se le aplica una ligera fuerza y se chafa cuando aplicamos algo más de intensidad.

Valor nutricional

Energía: plátano aporta 90 kcal cada 100 gramos.

La casi totalidad de la energía se la confieren los hidratos de carbono que contiene, que suponen un 25% de su composición total. La mitad de ellos suele ser azúcar en forma de fructosa, pero depende del estado de maduración. Cuanto más maduro más almidón se convierte en azúcar.

El plátano prácticamente no contiene proteínas ni grasas.

Minerales: El plátano es una fruta rica en magnesio y potasio por lo que es una gran aliada para los deportistas puesto que fortalece los músculos, mejora la circulación y previene los calambres musculares.

Es muy común ver a tenistas de elite darle un buen mordisco a un plátano entre juegos. El plátano es una fuente de energía natural con buena dosis de hidratos de carbonos complejos y simples, relación 1 a 1 (50% de cada), por lo que es una alternativa a productos deportivos industriales, ya que la fructosa es mejor que otros azucares para darnos energía rápidamente disponible. A todo esto hay que sumarle que el plátano es de fácil digestión y “cae” muy bien en estomago. Si a esto le sumamos los beneficios del potasio y el magnesio se nos despeja cualquier duda sobre su uso deportivo.

Diferencias con la banana

No se ha de confundir con la banana, aunque a veces es difícil distinguirlas, debemos de hacerlo, ya que son diferentes.

La banana es más calórica y tiene menos potasio, además, su textura es más puré y menos harinosa, por no olvidarnos del tamaño, la banana es más grande y alargada, el plátano más pequeño, grueso y curvado.

En España, mejor el plátano, por favorecer el producto de “cercanía” con denominación de origen Canarias… ahora entendéis los de la península porque puse cercanía entre comillas… Como característica diferenciadora sus aparentes motitas negras.

PODCAST: Aragón Radio

PROGRAMA: “Escúchate” del martes 23 de enero de 2018

NUTRICIÓN: Los plátanos.

LUIS GARCÍA RIOJA